El asesinato de Carlos Manzo acaparó durante las dos semanas previas a la marcha del sábado pasado la atención de la presidenta Claudia Sheinbaum. Desde el momento mismo en que Manzo cayó bajo las balas de un sicario, en la plaza principal de Uruapan, arrancó desde el gobierno federal la operación de control de daños y manejo de crisis que culminó con los hechos del 15 de noviembre, en medio de golpizas, nubes de gases lacrimóge...
1.- Desde hace muchos años he sido testigo de muchas marchas. En unas participo activamente y en otras asisto como testigo. Las marchas, con frecuencia, son l...
Durante muchos años no tuvo nada, por eso después lo quiso todo. A Alberto Aguilera Valadez lo abandonó su madre y con cinco años lo...
Diario aparecen más ingredientes del tiradero que le dejó López Obrador a su sucesora. Ya comprobamos las secuelas del huachicol fiscal, de la c...
Subestimar a Morena en su falta de escrúpulos a la hora de mezclar partido y Gobierno en una elección con revocatorio podría resultar costoso pa...
Mi primer “montaje” fue cuando tenía doce años. Iba en el metro rumbo a la escuela y un hombre eyaculó sobre mi uniforme. Me qu...
La escena fue incómoda, brutal. Claudia Sheinbaum, la presidenta de México, caminaba entre la multitud cuando un hombre se le acercó y, sin perm...
Para ser la Presidenta del país más democrático del planeta, doña Claudia Sheinbaum se expresa con el lenguaje de un déspota consu...
Grecia Quiroz comenzó a definir el momento crítico más allá de una arenga de plaza. "¿Saben qué? Ese día cay&oa...
